Proximamente el senador venezolano-vasco, Anasagasti será noticia relacionado de nuevo con el Valle de los Caídos. Para refrescar la memoria a nuestros lectores, socios y simpatizantes, y sin ningún ánimo de amargar a nadie el comienzo de éste 2013, recordamos aquí las palabras de Anasagasti en el Senado el dia 21 de junio de 2011.

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2 commentarios

Emilio Girón · 3 enero, 2013 a las 18:40

Al Anasabestia este se le ve el plumaje. La cabra tira al monte, y los primos de los terroristas de la organización socialista aberchale a la dinamita.
De un tipo que se tapa la calva con el pelo de un lado, no puede salir una idea buena.
Si se dinamitara con todos ellos dentro, bendita voladura, porque no habría sido en vano.

Guripa · 3 enero, 2013 a las 18:15

Como es bien sabido este senador de medio pelo milita en el Partido Nacionalista Vasco, que es una especie de organización de superhombres ungidos por el dedo de Dios para liderar a la humanidad, después de sacudirse el terrible yugo que los españoles hemos colocado sobre ellos de forma tan incomprensible, pues si tan distinta y privilegiada raza son los «bizkainos» ¿cómo resultó posible en un pasado lejano, muy lejano, que otra raza inferior les doblegara?. Misterios de la historia, una historia novelada por Sabino Policarpo Arana Goiri, el fundador de ese partido, que pretendió ser un Homero con chapela que escribiera una eusko-Ilíada para descerebrados.

Esta opinión parece que no es la única en el mismo sentido. Por eso mismo traeré a continuación, y a propósito de la majadería de intentar calificar al Valle de los Caídos como un monumento a Franco hecho por él mismo, comparándole con Hitler o Mussolini, la opinión que mereció al gran Jaime Campmany (E.P.D.) en su tiempo un monumento a ese orate de Sabino Arana que se hizo en Bilbao en 2003, a propuesta de otra lumbrera racista, exjesuíta, como es Javier Arzallus. La comparación natural de Hitler sería con Sabino Arana, por ideología, aunque el cabo de Bohemia sí luchó por su país en la Primera Guerra Mundial, mientras que este otro renegado felicitó por telegrama a Roosvelt por haber vencido a España en la Guerra de Cuba.

Vayamos con Campmany:

«En castellano, «arana» significa embuste, y también fraude o estafa, y de mentiras y fraudes están plagados los escritos políticos de Arana, don Sabino, fundador del nacionalismo vasco y padre espiritual de Javier Arzalluz y de Juan José Ibarreche. Vivió poco este Sabino Arana, pero lo suficiente para dejarse escrita una colección especialmente repugnante de insultos a los españoles y de miserables vituperios a las españolas. Nació en la segunda mitad avanzada del siglo XIX y falleció a los 38 años al comienzo del XX, precisamente en el 1903, de modo que este año se cumple el centenario de su muerte.

La mejor manera de celebrar ese centenario sería la de editar las Obras Completas del repulsivo personaje, y así los nacionalistas vascos tendrían ocasión de conocer particularmente y por menudo el pensamiento de su fundador, su doctrina entera y verdadera sin mutilaciones ni censuras, y de dónde vienen ellos y hacia dónde les llevan los dirigentes del PNV e intérpretes del singular doctrinario. He buscado los escritos de Arana y sólo he encontrado antologías y textos más o menos mutilados. Los mismos nacionalistas que creen y siguen esa doctrina esconden y expurgan sus textos, se avergüenzan de ellos y nunca los enseñan. Jamás he oído a Arzalluz, a Ibarreche, a Anasagasti o a Eguíbar citar un texto representativo del pensamiento de Arana. Es como si los cristianos ocultáramos el Evangelio.

Ya que los nacionalistas, que son sus seguidores, no lo hacen, alguien tendría que ocuparse en recopilar los escritos de Sabino Arana y hacer de ellos una edición completa y asequible, para que quien quiera pueda conocer su predicación. No basta con erigirle una estatua en Bilbao, esa estatua a la que Alfonso Ussía llama el «monumento al Tonto», sino que es necesario divulgar lo posible sus ideas para que todo el mundo conozca las tonterías del Tonto. Bien es verdad que, como dice el refrán, al tonto se le conoce pronto, y un florilegio de frases elocuentes ofrecería una idea aproximada del personaje, pero sus frases escogidas despiertan la curiosidad de conocer sus obras en toda su escatológica extensión.

La manera que tiene Arana de atribuir a los vascos las excelencias de una raza superior y privilegiada, algo así como las virtudes de un «pueblo elegido», y la desvergüenza con que señala a los «maketos» españoles como ejemplo de suciedad, de pereza y de descreimiento son dignas de ser conocidas por todos. Es bueno saber con quién nos estamos jugando algo más que los cuartos en el País Vasco. Porque Arana nos trata de guarros que no se lavan, de vagos que no dan golpe, de ladrones que roban lo ajeno, de blasfemos que ofenden a Dios y de gentes sin cultura, sin conciencia, sin moral. Lo menos ofensivo que dice de las mujeres españolas es que son tan desaseadas y cochinas que el olor de su ropa interior resulta insoportable para un vasco. Los «maketos» no sabemos comer, ni vestir, ni trabajar, ni hablar, ni rezar, ni siquiera lavarnos. Hay que leer a Sabino Arana para saber hasta dónde puede llegar la estupidez de los hombres. O sea, de algunos mequetrefes.»

Jaime Campmany, ABC, 8/11/2003

El gran Campmany no las cita, pero he aquí algunas de las excrecencias del ideólogo Arana, padre ideológico de nuestro senador de medio pelo. Las citas escogidas proceden de los periódicos y revistas en los que difundió su ideario, como Bizkaitarra, Baserritarra, La Patria y de su propia obra, su Mein Kampf titulado ¿Qué somos?. Sobran comentarios:

«El bizkaino es de andar apuesto y varonil; el español o no sabe andar, o si es apuesto, es tipo femenino». Bizkaitarra, nº 29.

«Nosotros, los vascos, evitemos el mortal contagio, mantengamos firme la fe de nuestros antepasados y la seria religiosidad que nos distingue, y purifiquemos nuestras costumbres, antes tan sanas y ejemplares, hoy tan infestadas y a punto de corromperse por la influencia de los venidos de fuera». La Patria, nº 39.

«Ya hemos indicado, por otra parte, que el favorecer la irrupción de los maketos es fomentar la inmoralidad en nuestro país; porque si es cierto que las costumbres de nuestro Pueblo han degenerado notablemente en esta época, débese sin duda alguna a la espantosa invasión de los maketos, que traen consigo la blasfemia y la inmoralidad». Bizkaitarra, nº 10.

«Nosotros odiamos a España con nuestra alma, mientras tenga oprimida a nuestra Patria con las cadenas de la esclavitud. No hay odio que sea proporcionado a la enorme injusticia que con nosotros ha consumado el hijo del romano. No hay odio con que puedan pagarse los innumerables que nos causan los largos años de dominación». Bizkaitarra, nº 16.

«¡Cuándo llegaran todos los bizkainos a mirar como enemigos suyos a todos los que les hermanan con los que son extranjeros y enemigos naturales suyos!» Bizkaitarra, nº 22.

«Les aterra oír que a los maketos se les debe despachar de los pueblos a pedradas. ¡Ah la gente amiga de la paz..! Es la mas digna del odio de los patriotas». Bizkaitarra, nº 21

«Gran número de ellos parece testimonio irrecusable de la teoría de Darwin, pues mas que hombres semejan simios poco menos bestias que el gorila: no busquéis en sus rostros la expresión de la inteligencia humana ni de virtud alguna; su mirada solo revela idiotismo y brutalidad». Bizcaitarra, nº 27.

«Antiliberal y antiespañol es lo que todo bizkaino debe ser». Bizkaitarra, nº 1.

«En pueblos tan degenerados como el maketo y maketizado, resulta el sufragio universal un verdadero crimen, un suicidio». Bizkaitarra, nº 27.

«El roce de nuestro pueblo con el español causa inmediata y necesariamente en nuestra raza ignorancia y extravío de inteligencia, debilidad y corrupción de corazón». Baserritarra, nº 11.

«La fisonomía del bizkaino es inteligente y noble; la del español inexpresiva y adusta. El bizkaino es nervudo y ágil; el español es flojo y torpe. El bizkaino es inteligente y hábil para toda clase de trabajos; el español, es corto de inteligencia y carece de maña para los trabajos más sencillos. Preguntádselo a cualquier contratista de obras, y sabréis que un bizkaino hace en igual tiempo tanto como tres maketos juntos». Bizkaitarra, nº 29.

«El bizkaino es laborioso; el español perezoso y vago». Bizkaitarra, nº 29.

«Oídle hablar a un bizkaino, y escuchareis la más eufórica, moral y culta de las lenguas; oídle a un español, y si solo le oís rebuznar, podéis estar satisfechos, pues el asno no profiere voces indecentes ni blasfemias». Bizkaitarra, nº 29.

«Muchos son los euskerianos que no saben euzkera. Malo es esto. Son varios los que lo saben. Esto es peor. Gran daño hacen a la patria cien maketos que no saben euzkera. Mayor es el que le hace solo maketo que lo sepa. Para el corazón de la Patria, cada vasco que no sabe euzkera es una espina; dos espinas cada vasco que lo sabe y no es patriota; tres espinas cada español que habla euzkera». Baserritarra, nº 8.

«Etnográficamente hay diferencia entre ser español y ser euskeriano, la raza euskeriana es sustancialmente distinta a la raza española». Bizkaitarra, nº 11.

«¡Ya lo sabéis, Euzkeldunes, para amar el Euzkera tenéis que odiar a España». Bizkaitarra, nº 31.

“¿Qué es, pues, lo que respecto de la pureza de la raza se contiene en el programa nacionalista? Puede reducirse en los puntos siguientes:
1) Los extranjeros podrán establecerse en Bizkaya bajo la tutela de sus respectivos cónsules; pero no podrán naturalizarse en la misma. Respecto de los españoles, las Juntas Generales acordarán si habrían de ser expulsados, no autorizándoseles en los primeros años de independencia la entrada en territorio bizkaino, a fin de borrar más fácilmente toda huella que en el carácter, en las costumbres y en el idioma hubiera dejado su dominación.
2) La ciudadanía bizkaina pertenecerá por derecho natural y tradicional a las familias originarias de Bizkaya, y en general a las de raza euskeriana, por efecto de la confederación; y, por cesión del poder (Juntas Generales) constituido por aquéllas y éstas, y con las restricciones jurídicas y territoriales que señalara, a las familias mestizas euskeriano-extranjeras”.

“Si nos dieran a elegir entre una Bizkaya poblada de maketos que sólo hablasen Euzkera y una Bizkaya poblada de bizkainos que sólo hablasen el castellano, escogeríamos sin dubitar esta segunda, porque es preferible la sustancia bizkaina con accidentes exóticos que pudieran eliminarse y sustituirse por los naturales, a una sustancia exótica con propiedades bizkainas que nunca podrán cambiarla”.

“Tanto están obligados los bizkainos a hablar su lengua nacional, como a no enseñársela a los maketos o españoles. No el hablar éste o el otro idioma, sino la diferencia del lenguaje es el gran medio de preservarnos del contacto con los españoles y evitar así el cruzamiento de las dos razas”.

“Si a esa nación latina la viésemos despedazada por una conflagración intestina o una guerra internacional, nosotros lo celebraríamos con fruición y verdadero júbilo, así como pesaría sobre nosotros como la mayor de las desdichas, como agobia y aflige al ánimo del náufrago el no divisar en el horizonte ni costa ni embarcación, el que España prosperara y se engrandeciera”.

Fuente: http://www.cierzo.blogia.com

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